jueves, 29 de diciembre de 2016

"Asylum" de Javier de Irusi para CEAR - Hablando de libros


Asylum viene del griego y significa "sitio inviolable". Un sitio que deberíamos tener todos, ya no solo por la Convención de los Derechos Humanos, sino porque nos debería salir de dentro, de los más profundo de nuestro interior, sin ningún tipo de duda.

Este cómic, que forma parte de la iniciativa "Memorias compartidas: una miada al derecho de asilo desde las experiencias de exilio durante el franquismo" coordinado por CEAR-EUSKADI, cayó en mis manos el otro día cuando pasé por la biblioteca. Había estado en contacto con la ONG hacía poco y además el tema de los refugiados es algo que forma parte de mi vida no sólo en los medios (como para la mayoría) sino en el día a día, ya que colaboro con una organización que trabaja con ellos e intento hacer campañas de sensibilización. Así que lo cogí y lo devoré en la cocina, mientras preparaba la cena y después, mientras los platos se resecaban una vez terminado, pegada al radiador y con el sonido del frigorífico de fondo.

Cuenta la historia de Marina, una anciana de Bilbao a la que su familia le va a visitar a un asilo y en una conversación con su nieta rememora la época de la guerra de civil, los bombardeos, la huída a Francia, después a México... Pero también cuenta la historia de Sanza, Aina, Chris e Imelda, que huyen de otras guerras, otras injusticias, otras violaciones de derechos, porque desgraciadamente de eso sigue habiendo mucho. Entremezclando, de manera ingeniosa,  todas esas historias de quienes tienen que huir de su hogar para salvar su vida afrontando todo tipo de discriminaciones y demostrando, como dicen en el libro, "la capacidad que tenemos para resistir y reconstruirnos".

Es un cántico a la visibilidad de nuestro presente, el que tenemos a la vuelta de la esquina y del que nos tenemos que hacer responsables.

Una buena elección para seguir luchando por lo que creemos justo.

domingo, 25 de diciembre de 2016

Islandia y el Jólabókaflód, la tradición de regalar libros en Nochebuena

Yo copio a Islandia con el Jólabókaflód, cuyo significado es algo así como "Inundación de libros en Navidad", y me recojo en mi casa con los libros que me han regalado (que se que van a ser varios) a leer! Solo que tendrá que ser después de la cena familiar (a eso no se puede faltar). Así que inauguro la tarde del 25 como oficialmente mi tarde del Jólabókaflód.


Esta palabra impronunciable me hace recordar una noticia que descubrí hace poco de palabras que no existen en nuestro idioma y a una diseñadora gráfica, Anjana Iyer, que ha recogido en un libro una serie de ilustraciones con varias de estas palabras que se llama Found in Traslation. Algo muy interesantes que te abre los ojos ante la grandeza del vocabulario del mundo y las formas de expresión. Ojalá pudiéramos adaptar varias de ellas...


Pero siguiendo con el Jólabókaflód (esta la podríamos adaptar pero con un nombre un poquito más.... simple ;) , hay que saber que esta tradición islandesa comienza ya en el mes de noviembre, cuando cada casa recibe gratuitamente en su buzón el Bókatídindi, un catálogo en el que se resumen las nuevas publicaciones de la Asociación de Editores de Islandia (Aprovecho para añadir aquí que Islandia es uno de los primeros países en los rankings en número de libros leídos por persona y año, en número de libros publicados, en número de escritores, de editores... Vamos el país por excelencia de estas pequeñas piezas que nos enamoran. Y que Reykjavik ha sido designada por la UNESCO, Ciudad de la Literatura, por su rica tradición literaria en la que destacan sus famosas sagas medievales, que aún se conservan en ciertas partes de la ciudad, en tazas y servilletas, incluso al sentarse en los bancos tienen un código QR para los smartphones). Y volviendo al tema, que hay mucho que añadir y nos perdemos, a partir de noviembre y durante diciembre los libros son los grandes protagonistas de las fiestas, y las compras. Y según lo que cuentan, las familias se pasan la noche leyendo sus regalos. 
Se dice que esta tradición viene de la II Guerra Mundial, cuando las estrictas restricciones de capital reducían la cantidad de objetos importados a Islandia, sin embargo las limitaciones al papel importado eran menos severas, lo que propició que los libros se convirtieran en el regalo de la Navidad por excelencia. Desde entonces, los islandeses han mantenido la tradición. 
Así que ya va siendo hora de que se propague como la pólvora. Aquí tengo "mis regalos" y la nueva palabra va directa a mi diccionario. 

lunes, 19 de diciembre de 2016

Feliz 19 de diciembre para Isabel Coixet


Hoy, 19 de diciembre, a mi ADORADA Isabel Coixet le otorgan el premio Atlántida, un premio que se da una personalidad de prestigio, ajena al mundo del libro, que haya contribuido al fomento de la lectura.  ¡Ole, ole y ole!

La descubrí hace varios años con la película "Mi vida sin mí" y me dejó atónita ante tanta dulzura y dureza unidas. Hace unos años me maravillo con la exposición sobre el extraordinario libro de John Berger  "De A para X" (que quien no haya leído tiene que correr a la biblioteca o a una librería a por él). Y ahora me he enterado que en 2017 va a estrenar la adaptación de la novela de Penélope Fitzgerald "La librería", rodada en Asturias y en la que además ha encargado a una firma local el vestuario de sus protagonistas (¡Así me gusta, fomentando el mercado local!)

Así que no solo no me extraña el premio que va a recibir, sino que me alegra sobremanera.

Siempre me he sentido "un poco" cerca de esta artista que roza como con una ligera brisa todo aquello que toca, y a la que los temas sociales le han embaucado en varias de sus producciones( documentales sobre crisis olvidadas, las torturas de Sarajevo, el caso de la polémica del Juez Garzon, del desastre del Prestige, las victimas de las torturas del ex-dictador de El Chad...)

No es solo su mirada intimista, es también la forma en que tiene de retratarnos la realidad, real, como es. Dura,  como es. Ácida, como es. Emotiva, como es.
Es cierto que no todo todo todo lo que ha hecho lo subrayo, (alguna película se me ha quedado a la mitad) pero la mayoría sí. Y leer esta noticia, aunque no es el primer premio que recibe, pero si el más relacionado con los libros, me ha emocionado. 
¡Enhorabuena Isabel! 

jueves, 15 de diciembre de 2016

"Kathleen" de Christopher Morley- Hablando de libros



Entré a una librería en busca de una cosa y salí con otra ¿A alguien le suena? Pero es que me topé con este libro del que había oído hablar en un blog que me encanta y lo compré. 

Leer la contraportada me convenció para sumergirme en sus apenas ciento veinte páginas, ya que a las palabras "club literario", "reto", "búsqueda" y "juego" nunca me he podido resistir.
No había leído todavía nada de Christopher Morley, pero lo tenía en mi laaaarga lista de "Libros por leer" con "La librería encantada" (que por cierto el otro día lo vi en otra librería y casi caigo, pero hay que racionarse).

El caso es que a pesar de que me costó un poco leerlo debido a que la dinámica de principios de siglo pasado ha dejado de ser el punto primordial de la elección de mis lecturas, la intriga me animó y terminó por dejar paso a una lectura placentera.
Pero no fue solo eso, ya que se le unió el descubrimiento de todas esas costumbres de una época que no conocía, como los sirvientes en las residencias, la parafernalia de las conversaciones, la estética de los halagos y los entresijos de una sociedad que no es tan lejana, pero que desgraciadamente ha pasado a un plano demasiado perdido debido a la aceleración de los cambios actuales.
Y digo que se unió a esos descubrimientos porque lo fueron. La sorpresa se iba apoderando de mí mientras avanzaba en la lectura, y también esa fina línea que roza lo real y lo imaginario. 
El embrollo es descomunal, y la situación termina por ser tan irreal que la risa se apodera y de tí y solo quieres ver cómo acaba.

Está bien para pasar el rato, pero tengo mejores expectativas de "La librería encantada". Ese sigue en mi lista.


viernes, 9 de diciembre de 2016

Descuentos en una barbería de Michigan por leer en voz alta


Hay veces que la gente tiene unas iniciativas increíbles, como es el caso de esta barbería de Michigan, "The fuller cut", donde ofrecen un descuento de 2$ a cada niño que lea en voz alta al barbero mientras éste le corta el pelo.

Una de las cosas más importantes es que una barbería es un lugar que no tiene nada que ver con la lectura y conectar esos momentos a algo tan importante es algo significativo. Pero lo es más que sus fundadores lo hagan porque  "Si podemos hacer que los niños vuelvan a 'The fuller Cut' como adultos en la universidad y nos digan: <> Ese es realmente el objetivo final".

Sus libros además tienen siempre la misma temática, hablar de los afroamericanos en positivo, inculcarles que todo es posible y que se puede llegar muy lejos y ser lo que deseen, si estudian y tienen constancia. 

El racismo está muy extendido en el "continente de las posibilidades" y muchas veces se necesitan iniciativas como estas para inculcar desde la infancia que TODO es posible para TODOS.














miércoles, 7 de diciembre de 2016

"Océano África" de Xavier Aldekoa.- Hablando de libros...






       Hablar de los libros que una lee es una buena forma de darlos a conocer a todas esas personas que quizá necesiten un empujón para leer una cosa, u otra, o nada pero a las que les gusta leer lo que otros dicen para tener cubiertos sus minutos de libros al día o la semana. Hay personas para todo, y ¡gracias a Dios!. Aunque los de los libros me gusten más ;)

       Así que es esta es otra de las propuestas que me han hecho y que iré dejando por aquí.

      "Océano África", de Xavier Aldekoa, cayó en mis manos hace unas semanas al leer que se trataba de un libro sobre crónicas de África. Deseosa de leer vivencias que me iban a recordar mi trabajo por el continente e historias de las que nunca había oído hablar pero que completarían ese imaginario que todos tenemos, me lancé en su búsqueda y lo conseguí en una de las bibliotecas de mi ciudad.

     Ha sido una lectura tranquila, reposada, en la que cada vez que leía varias de ellas lo dejaba descansar en la mesa y pasaba a otra cosa. Este tipo de artículos hay que dejarlos asentarse poco a poco, porque sabes que en algún lugar del mundo ha pasado, pasa y seguirá pasando, y hay partes que son difíciles de asimilar.

     Escrito con una prosa especial, Xavier Aldekoa, gran conocedor de África y corresponsal desde hace años de La Vanguardia nos muestra una realidad que a los que la conocemos nos hace sonreir de complicidad a veces, entristecernos otras, encajar piezas la mayoría. Y a los que nunca han vivido estas realidades, creo que les hará crearse una buena imagen de un continente que está en profundo cambio pero en el cual las tradiciones cuentan más que nada, les hará sumergirse y entender que los prejuicios no sirven de nada por que la vida real es la que te marca lo que de verdad existe.
Una buena manera de conocer África sin viajar allí, una buena manera de enfrentarte a un mundo del que sabemos poco, y ese poco muchas veces está tergiversado.